furor
la emergencia de un furor inapelable salpica la tierra grávida de promesas yertas
maraña de raíces vulneradas los soliloquios de la carne en la intemperie
pálida la palabra vela el gesto solapado de un tiempo inaprensible
de un mundo funámbulo entre el sol y la nostalgia
donde el verbo robado navega los huracanes a pesar de todo
lánguida nos guarda la penumbra en la pasión de lo callado por decirse
el vibrato de un aliento que renace
ese extraño sentimiento de perderse en la lucidez del sueño que nos sueña
una inmovilidad errante
oculta alucinada clandestina
la de una retina que baila bajo los párpados
Julio 2020