hay revelaciones que súbitamente se abren y vacilan en el borde de lo inteligible
y se nos quedan dentro palpitando como voces quebradas
como viejas heridas que retornan
irreverentes en su inercia y en la inutilidad de un vacío impiadoso donde se ahonda
la ignorancia
pero algo queda
como un eco retumbando
sabemos de un lugar donde faltamos en algún amanecer
un espejismo una aparición un sueño
una ilusión quizá
donde nos desvanecimos
y fuimos
presencias fugaces resbalando como sombras
almas atrapadas en un tiempo surcado de grietas
por donde se escuchaban cuerpos que respiraban aire y
vivían en lo ausente como brisas y tormentas
a veces se vive sin saberlo dentro de la cripta de un secreto sin palabras
aunque de tarde en tarde puertas invisibles nos arrastran hacia reinos liminares
Marzo 2 de 2024