silenciosos derrumbamientos pasan a veces desapercibidos
a las miradas ajenas
como el templarse de una taza de té
la luz del aire de una nada
o ese hueco helado de la ausencia
son los solos los callados los que no hablan la lengua social los diferentes
los que se abrazan a la piedra por las noches
claro que nadie anda por ahí tratando de penetrar un corazón devastado
como tampoco saben que en un corazón como ese hay aun fuegos sagrados ardiendo
aunque el mundo los haya declarado en estado de indigencia
es que lo sublime aun no nos ha alcanzado
y no somos capaces de deponer nuestros más banales pensamientos
ni de asumir que hemos perdido el asombro de lo humano
ni de reconocer al héroe de la vida diaria
por eso cada imagen que vemos debería robarle algo a esa pretendida realidad del mundo
que no solo ha desaparecido sino que ha perdido el sentido
y lidiar con ella es padecer lo que oculta
lo que resta oscuro lo invisible lo desconocido
un vacío radiante que no le teme a lo ingrávido
Agosto 27 de 2024