tantas preguntas apretaban el paso de los días que las dejé caer en un poema
que inadvertidamente se ha disipado en el aire
y me pregunto cómo desvanecer la pasión sin tregua que me inspira
cómo se borrar las palabras que se deslizan de mi mano en el ir y venir de la escritura
cómo no sentir esa sublevación del aire ante la sola idea de un naufragio de las letras
de un olvido de lo que hubiera podido decirse
si el caos el bendito intruso se escondiera como el mar sobre una estela
y dejaran de escucharse esas voces que alborotan la existencia
la memoria seguiría trabajando tratando de descolgar un destello interrumpido
tratando de eclipsar el pensamiento para poder vibrar con el espíritu
con esa desnudez que hace palidecer hasta la luna?
quedarían quizá signos imágenes rupturas
fragmentos discontinuos distantes y dispersos
ecos vibraciones y desbordes
huellas que restan bajo las cenizas esparcidas en el aire
como polvo
casi nada
restos inquietos de ese gris de ausencia
somos tan frágiles
mejor es el olvido
y que de pronto te asalte algo tan desconocido
y nuevo
y tuyo
tan inigualablemente tuyo
que no haría falta recordar
Setiembre 13 de 2024